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martes, 29 de marzo de 2016

Manuel Sikh: “Cada uno puede forjar su destino”

Por Jodor Jalit

De paseo por el interior del país, miembros de la redacción fueron recibidos calurosamente por la Comisión Directiva del Club Social Sirio Libanés de la ciudad de Santa Fe y su presidente, Manuel Sikh, charló con los mismos sobre la actualidad y el futuro de la institución.

El Club Social Sirio Libanés se fundó el 17 de marzo de 1924 con domicilio en 9 de Julio al 3100 por un colectivo de inmigrantes que buscaba un lugar donde mantener viva tradiciones culturales y así minimizar el desarraigo mientras construían un nuevo hogar, explicó Sikh.

En principio el club tomó el nombre Sociedad Unión Sirio Libanesa de Socorros Mutuos, en sintonía con los tiempos que corrían y las acciones de las demás colectividades en el país. Así, la institución cumplió una función social de carácter benéfico, porque ayudaba a personas con bajos recursos.

Esos fueron los primeros pasos de un espacio que se transformó en modelo a seguir para el resto de las colectividades arraigadas en la ciudad, y que con 91 años de vida, sostiene su domicilio sobre calle 25 de mayo al 2740, entre Eva Perón e Irigoyen Freyre, a metros de la calle peatonal San Martín.

Me gustaría que luego de compartir parte de la historia de la institución, nos cuentes sobre tu vínculo familiar con Siria. ¿Son tus padres argentinos?

Papá llegó en barco a la Argentina el 1 de diciembre de 1950 procedente de Aleppo, y mamá es nacida en Argentina, pero sus padres que también eran de Aleppo arribaron al país en la década de 1920.

Todos atracaron en la ciudad de Buenos Aires, y el padre de mamá, Manuel Saab con 17 años, y mi papá con 25 años se radicaron inmediatamente en la ciudad de Santa Fe y facilitada por sus respectivos hermanos que ya residían en la provincia.

Ambos abuelos eran comerciantes emprendedores y alcanzaron un éxito económico relativo, aunque la vida de Manuel se truncó anticipadamente víctima de una serie de enfermedades.

Hoy te desempeñas como Presidente de la institución, ¿qué nos podes contar sobre el rol del club en la ciudad?

Es la institución social que nuclea a la colectividad árabe más antigua de la provincia de Santa Fe, y se encuentra entre las más antiguas del país. Se inició como asociación de beneficencia y se transformó en club social años más tarde.

A pesar de que ya no son los años 50’s o 60’s cuando los clubes sociales se encontraban en su mayor popularidad, hoy la institución continúa vigente a través de diferentes actividades, entre las que destaco: clases de danza, instrucción de idioma, gimnasia muscular y artes marciales.

Además, en nuestra sede funciona un restaurant diario y contamos con un salón de usos múltiples para la realización de eventos privados.

Santa Fe es una provincia colonizada por inmigrantes y la fiesta de las colectividades tiene una gran importancia, ¿cuál es el rol de la colectividad siria y libanesa en los festejos?

La colectividad siria y libanesa es miembro fundador del ente Fiesta de las Colectividades de la ciudad. Lamentablemente hace poco perdimos a dos jóvenes baluartes, Gabriel Hamwi y Miguel Ángel Labath, que formaron parte de la creación del ente.

Ese evento es uno de los más importantes en la vida social del club porque cuenta con el apoyo del gobierno de la ciudad y provincia, y asisten cerca de 100,000 personas durante los 3 días para visitar los stands de más de 20 colectividades.

¿Cómo es su relación con otras instituciones de la colectividad en la ciudad y a nivel nacional?

Tenemos una fluida relación con el Club Social Argentino Sirio de Rosario y Club Sirio Libanés de Buenos Aires por la cercanía geográfica y amistades personales. También hemos participado de actividades junto a las instituciones sirio libanesas de San Carlos, Rafaela y Reconquista.

Los jóvenes ofrecen la oportunidad de continuar el trabajo iniciados por los mayores. ¿Cuál es la relación con los jóvenes?

Tratamos de que los chicos estén presentes en todo lo que hacemos e incorporar sus inquietudes. Además, son nuestros embajadores en localidades de la provincia y en el exterior al presentarse como grupo de baile.

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Comisión Directiva

Pude conocer a la Comisión Directiva y vi un grupo muy unido. ¿Qué los mantiene juntos y con ganas de seguir trabajando?

Somos un grupo de amigos, algunos con vínculos familiares inclusive, que al final de cada reunión cena junto. De esa manera, alimentamos la pasión para encontrar un motivo genuino por el cual reencontrarnos y disfrutar lo que hacemos.

El grupo es variado en edades y profesiones lo cual nos ayuda a encontrar un balance. Los más viejos brindan experiencia y los jóvenes inquietudes.

Para cerrar volviendo al origen, ¿cómo transmitís a tus hijos tu pasión por la colectividad?

Al entrar al local viste un cuadro donde se ve a mi padre con sus hermanos y hermanas frente al Hotel de Inmigrantes, y que para nosotros tiene un gran valor emocional por el respeto, admiración y ejemplo que inspira.

Yo se lo muestro a mis hijos, y haciendo hincapié en el esfuerzo realizado a lo largo de su viaje y primeros momentos en la Argentina, les enseño que cada uno puede forjar su destino. 

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