Francia fomenta más presión europea sobre el Líbano

En medio de tensiones entre los principales líderes políticos del  Líbano, el presidente Michel Aoun y el primer ministro designado Saad Hariri - que volvieron a frustrar las esperanzas de un avance en el estancamiento de la formación del gabinete - Francia y sus socios europeos insisten en ejercer más presión. 

La advertencia fue emitida por el ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean Yves Le Drian, quien habló por teléfono con Aoun, con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, y con Hariri. La brecha cada vez más profunda entre Aoun y Hariri sobre la distribución de puestos ministeriales clave dejó al país mediterráneo durante más de siete meses sin un gobierno y, desde Europa, Francia asegura que “mayor presión” es la única forma que queda para resolver las diferencias.

Francia aseguró a los principales funcionarios libaneses que la Unión Europea ahora está explorando formas de ejercer presión sobre quienes han obstruido la búsqueda de una solución a las crisis económicas y políticas en el país.

"La atención ahora se centra en la presión europea sobre los funcionarios libaneses para detener la obstrucción de la formación del gobierno y, posteriormente, liberar el camino para implementar reformas para salvar la economía del país", dijo a un medio local una fuente política cercana al Palacio de Baabda.

Aoun volvió este lunes a arremeter contra Hariri, acusándolo de socavar las reglas adoptadas en el proceso de formación del gobierno y de buscar monopolizar la formación e ignorar el papel del presidente en el proceso. Las declaraciones del presidente, que reflejan tensiones prolongadas y una crisis de confianza con Hariri, arrojan dudas sobre los esfuerzos locales en el proceso.

La semana pasada, después de celebrar su 18° reunión con Aoun desde su designación el 22 de octubre, Hariri afirmó que el presidente insistió en obtener el poder de veto en el nuevo gobierno, un obstáculo importante que ha bloqueado la formación y algo que el PM designado ha prometido no otorgar a ninguna de las partes en conflicto.