Israel bombardea la iglesia de la Sagrada Familia en Gaza y asesina a dos civiles

Un bombardeo israelí alcanzó el techo de la iglesia de la Sagrada Familia en la Ciudad de Gaza, asesinando a dos mujeres palestinas e hiriendo a seis personas, entre ellas el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, según denunció el patriarcado latino de Jerusalén. El ataque se produjo mientras continuaban los bombardeos intensivos sobre el barrio histórico de al-Zaytun, donde más de 500 cristianos palestinos estaban refugiados dentro del complejo eclesiástico.

El proyectil, presuntamente disparado desde un tanque israelí, impactó a las 10:10 de la mañana en la zona delantera del templo, provocando el colapso parcial de su estructura y la caída de escombros sobre civiles que se encontraban en el patio interior. Entre las víctimas fatales se encontraban dos mujeres mayores que participaban de actividades suspendidas por la escalada de violencia. El padre Romanelli, argentino y cercano al papa Francisco, sufrió heridas en una pierna y fue hospitalizado en Al-Ahli, donde permanece estable.

Desde Roma, la primera ministra Giorgia Meloni calificó de “inaceptables” los ataques israelíes contra la población civil y denunció que “ninguna acción militar puede justificar esta actitud”. El Vaticano aún no ha emitido una declaración oficial, aunque el papa ha manifestado reiteradamente su cercanía con la comunidad cristiana de Gaza, víctima de agresiones previas como la que en 2023 acabó con la vida de dos mujeres en el mismo templo, y la masacre de 18 refugiados en la iglesia ortodoxa de San Porfirio.

La impunidad con la que el régimen israelí destruye hogares, hospitales, escuelas, mezquitas e iglesias en Gaza, deja al descubierto la complicidad internacional y la absoluta falta de mecanismos efectivos para frenar su ofensiva. Este nuevo crimen de guerra, cometido en un lugar de culto bajo protección del derecho internacional, refuerza la necesidad de una respuesta clara contra el terrorismo de Estado del régimen ocupante.