Gaza: Israel asesinó a diez niños palestinos mientras buscaban agua

Diez personas, entre ellas seis niños y cuatro adolescentes, fueron asesinadas el domingo en un ataque israelí en el campo de refugiados de Nuseirat, en el centro de Gaza. Las víctimas esperaban su lugar en la fila para llenar bidones de agua junto a un camión cisterna cuando un dron lanzó un misil directamente sobre la fila. Otras dieciséis personas resultaron heridas, incluidos siete menores, según informaron fuentes médicas del hospital Al-Awda.

El hecho ocurrió a primera hora de la mañana, en una zona densamente habitada, cerca de una escuela y a pocos metros de un jardín infantil. Las imágenes verificadas muestran los cuerpos destrozados entre charcos de sangre y bidones amarillos de plástico, mientras vecinos y familiares intentaban socorrer a los heridos.

El ejército israelí reconoció haber ejecutado el ataque, y lo atribuyó a un “error técnico” durante una operación dirigida contra un presunto miembro de la Yihad Islámica. Según su comunicado, el proyectil cayó “decenas de metros” fuera del objetivo previsto. Pese a admitir la autoría del bombardeo, el régimen de ocupación insistió en que “lamenta cualquier daño a civiles no involucrados”.

El contexto de este crimen es una Gaza devastada: más del 90% de las viviendas están dañadas o destruidas, el sistema de agua ha colapsado, y miles de personas deben hacer largas filas para acceder a alimentos o combustible. Solo en las últimas seis semanas, el hospital de campaña del Comité Internacional de la Cruz Roja en Rafah trató a más de 3.400 heridos por armas de fuego, muchos de ellos alcanzados cerca de centros de distribución de ayuda.

Los responsables del régimen israelí saben lo que hacen: disparan contra filas de sedientos, rodean los centros de distribución con francotiradores, impiden el ingreso de prensa extranjera y califican de “errores” lo que es en realidad una estrategia deliberada de exterminio. En Gaza, buscar agua es una sentencia de muerte. Y mientras la infancia palestina cae bajo el fuego, el mundo continúa mirando hacia otro lado.