Jóvenes del Club Sirio Libanés en Polonia

En cordial charla con esta Redacción, los jóvenes del Club compartieron sus vivencias tras su especial experiencia en la edición 2016 de la Jornada Mundial de la Juventud (JNJ 2016 ).

El evento es convocado en forma regular por la Iglesia Católica Apostólica Romana a su feligresía mundial, y fue realizado este año en Cracovia, Polonia del 26 al 31 de julio. Es un gran acontecimiento, en el que fiesta y fe se unen inseparablemente y al que el Papa invita a jóvenes de todo el mundo a un lugar concreto. 

Los viajeros entrevistados son Nicolás Paroni (16), Gustavo Abdala (16), Mateo Paroni (17) y Facundo Ursino (19). Los cuatro, a su vez comparten el mismo secundario, el Colegio San Maximiliano Kolbe del barrio de Belgrano, en el cual Nico y Gustavo cursan 4º año, y Mateo el 5º. Facundo, por su parte, es egresado reciente de la institución, y hoy está cursando la carrera de Derecho en la Universidad de Bs. As. (UBA).

-¿Cómo surgió participar en la Jornada?

-F: el Colegio propuso la idea a criterio de los padres, quienes estuvieron de acuerdo en formar un grupo de cerca de 25 chicos, que viajó bajo supervisión de un plantel docente como parte del contingente argentino que era bastante grande, cerca de 6000 personas.

-¿Viajaron con anticipación?

-M: si, llegamos a Europa unos 20 días antes, para hacer una recorrida previamente organizada, que incluyó conocer rápidamente Paris, Estocolmo, Copenhague, Berlín, Brujas, Amsterdam y una vez en Polonia, estuvimos primero un poco en Varsovia y Chestokova antes de ir ya a la Jornada en Cracovia.

-Y la Jornada… ¿multitudinaria?

-N: Si, había delegaciones de 170 países. Del mundo árabe, un montón, y de América Latina también casi todos estaban presentes.

-¿Cómo anduvieron con los idiomas?

-Todos: Inglés un poquito… Francés hasta ahí… y hasta robamos un poquito con el Árabe.

-F y G: En la torre Eiffel nos cruzamos con unos argelinos y nos presentamos y los pudimos saludar. Y en el encuentro con chicos de la delegación libanesa con quienes nos sacamos fotos, y también con los sirios. Nos escapábamos un poquito de nuestro grupo para sacarnos fotos con ellos, con las banderas argentina, siria, y libanesa, y la camiseta del Club que conjuga todo.

Los libaneses nos regalaron dos pulseritas especiales de ellos y también para tener el souvenir, nos intercambiamos 1000 libras libanesas por 10 pesos, buscando coincidir con el cambio.

-¿Pudieron visitar algún otro sitio importante?

-F: Por un tema de tiempo, porque había mucha cola, no pudimos ingresar a la Iglesia de la Misericordia ahí en Cracovia, que es muy hermosa.

-G: también seguimos mucho el camino del patrono del colegio, San Maximiliano Kolbe , que justamente es un santo polaco que dio la vida en el campo de Auswitch. Tanto en Chestokova como en Varsovia, vimos determinadas iglesias o su casa, todo referido a su historia. 

-¿Qué pueden destacar del encuentro?

-M: me gustó mucho que se le diera presencia al tema de los refugiados sirios, especialmente los que están en Líbano, tema que toco bastante el Papa en su mensaje a los jóvenes. Porque además el tema de la Jornada 2016 fue “La Misericordia”.

-G: Me resultó muy emotivo sentirnos parte de algo mundial, el mero hecho de participar de un encuentro tan multitudinario en el cual compartís con tantos países, idiomas y culturas distintas, no solo en las actividades programadas del encuentro, sino también caminando por las calles en la ciudad, comunicándote más allá del idioma, realmente único.

-M: Se daba que te encontrabas con un italiano por la calle y te enganchabas a cantar con él, o ponernos a bailar un baile típico con los africanos, todos en ronda, cosas que no te imaginabas jamás que iban a darse.

-F: fue sentirse hermanado con gente que en tu vida viste, ni te imaginabas te ibas a cruzar…

También las vigilias estuvieron muy buenas, muy espirituales, fuertes, y también difíciles porque teníamos el miedo a todo el tema de los atentados recientes en Europa, uno sin duda se siente expuesto. Y eso generó un rezo especial previo a salir y un refuerzo de la fe muy importante.

-N: El valor más destacable de un evento de esta magnitud fue incorporar a través del intercambio personal, la aceptación de todo aquel que es distinto, el perdón, y la solidaridad, como parte de ese gran concepto más amplio que es la misericordia.