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martes, 27 de diciembre de 2022

Las sanciones de EEUU están matando sirios y son una violación de los derechos humanos

Por Steven Sahiounie / Traducido por Redacción DSL

Con la llegada del invierno, se sienten los efectos del terrorismo económico disfrazado de “sanciones”, al que se suma al saqueo de petróleo y granos, como parte de un plan desestabilizador contra el Estado Sirio cuya población resiste en medio del sufrimiento y las privaciones.

Fuente: Mideast Discourse

Damasco ahora está terriblemente frío y pronto estará cubierto de nieve. Alrededor de 12 millones de sirios se enfrentan a un invierno mortal sin combustible para calefacción, gasolina para el transporte y casas oscuras cada noche sin electricidad. Alepo, Homs y Hama también son extremadamente fríos durante todo el invierno.

Imagínese estar enfermo y tener que caminar al médico o al hospital. Las ambulancias en Siria ahora responderán solo a las llamadas más peligrosas para la vida porque deben ahorrar gasolina o se quedarán sin combustible por completo. La gasolina en el mercado negro cuesta a los sirios el equivalente a 50 dólares estadounidenses por un tanque de combustible de 20 litros.

Las sanciones contra Siria fueron impuestas por la Unión Europea (UE), Estados Unidos, Canadá, Australia, Suiza, la Liga Árabe y otros países a partir de 2011. Las sanciones tenían como objetivo derrocar al gobierno sirio privándolo de sus recursos. El (proyecto de) “cambio de régimen” patrocinado por Estados Unidos fracasó, pero las sanciones nunca se levantaron.

Durante 12 años, EEUU y la UE han estado imponiendo unas sanciones económicas a Siria que han privado a los sirios de su dignidad y derechos humanos.

Nuevo informe de la ONU pide levantar las sanciones a Siria

La relatora especial de la ONU sobre derechos humanos, Alena Douhan, instó a que se levantaran las sanciones contra Siria, advirtiendo que estaban aumentando el sufrimiento del pueblo sirio desde 2011.

“Estoy impresionada por la omnipresencia del impacto humanitario y de derechos humanos de las medidas coercitivas unilaterales impuestas a Siria y el aislamiento económico y financiero total de un país cuyo pueblo está luchando por reconstruir una vida con dignidad, luego de una guerra de una década”, dijo Douhan.

Después de una visita de 12 días a Siria, Douhan dijo que la mayoría de la población de Siria vive actualmente por debajo del umbral de la pobreza, con escasez de alimentos, agua, electricidad, vivienda, combustible para cocinar y calefacción, transporte y atención médica. Habló del éxodo continuo de sirios educados y calificados en respuesta a las dificultades económicas de vivir en su tierra.

Douhan informó que la mayor parte de la infraestructura fue destruida o dañada, y las sanciones impuestas al petróleo, el gas, la electricidad, el comercio, la construcción y la ingeniería han disminuido el ingreso nacional, lo que ha impedido la recuperación económica y la reconstrucción.

Las sanciones impiden recibir pagos de bancos y entregas de fabricantes extranjeros. La grave escasez de medicamentos y equipos médicos ha afectado a los hospitales y las clínicas. La falta de un sistema de tratamiento de agua en Alepo provocó un grave brote de cólera a fines del verano, y el sistema no se puede comprar, instalar ni mantener bajo las sanciones actuales de EEUU contra Siria.

Douhan dijo: “Insto al levantamiento inmediato de todas las sanciones unilaterales que dañan gravemente los derechos humanos e impiden cualquier esfuerzo de recuperación temprana y reconstrucción”.

Las sanciones estadounidenses no son efectivas

En 1998, Richard Haass escribió : “Sanciones económicas: algo malo en demasía”. Advirtió a los responsables de la política exterior de EEUU que las sanciones por sí solas son ineficaces cuando los objetivos son grandes o el tiempo es corto. El derrocamiento del gobierno sirio es un objetivo masivo, y las sanciones no lograron ese objetivo.

Haass predijo que las sanciones podrían causar problemas económicos y migración. En el verano de 2015, alrededor de medio millón de sirios caminaron por Europa como inmigrantes económicos y fueron acogidos principalmente por Alemania.

Existe un imperativo moral de dejar de usar las sanciones como una herramienta de política exterior porque personas inocentes se ven afectadas, mientras que las sanciones han fallado.

Estados Unidos roba petróleo sirio y no permitirá que llegue petróleo importado

Según el gobierno de EEUU, las sanciones a Siria “prohíben nuevas inversiones en Siria por parte de estadounidenses, prohíbe la exportación o venta de servicios a Siria por parte de estadounidenses, prohíbe la importación de petróleo o productos derivados del petróleo de origen sirio y prohíbe a los estadounidenses participación en transacciones que involucran petróleo sirio o productos derivados del petróleo”.

Existe una dispensa que se puede solicitar al Departamento de Comercio, para eludir las sanciones; sin embargo, solo se aplica al envío de artículos al área de Idlib ocupada por terroristas. Hayat Tahrir al-Sham (ex Frente Al-Nusra) era la filial de Al Qaeda en Siria y es el único grupo terrorista que ahora tiene territorio en Siria.

El 22 de octubre, el medio Energy World informó que las fuerzas de ocupación estadounidenses habían pasado de contrabando 92 camiones cisterna y camiones de petróleo y trigo sirios robados del noreste de Siria a las bases estadounidenses en Irak. El robo es constante y continuo.

EEUU se ha asociado con las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), que es una milicia kurda que tiene un ala política que sigue la ideología comunista iniciada por Abdullah Ocalan del PKK. El presidente Trump ordenó que el ejército de EEUU se quedara para ocupar el noreste de Siria y ordenó a los soldados estadounidenses que robaran el petróleo sirio para evitar que el pueblo sirio en el resto del país se beneficiara de la gasolina y la electricidad producida por los pozos.

El Ministerio de Petróleo de Siria dijo en agosto que las fuerzas estadounidenses estaban robando el 80 por ciento de la producción de petróleo de Siria, causando pérdidas directas e indirectas de alrededor de 107.100 millones a la industria de petróleo y gas de Siria.

Debido a que el gobierno de Damasco se ve privado del petróleo que producen sus pozos, se ve obligado a depender del costoso petróleo importado, generalmente de Irán. Los EEUU se apoderan rutinariamente de los petroleros iraníes, como el incidente reciente cuando la Marina de EEUU tomó como rehén a un petrolero frente a las costas de Grecia en su camino a Siria, que luego fue finalmente liberado por Grecia.

Escasez de gasolina

Para ahorrar combustible, el gobierno ha instituido un fin de semana de tres días para escuelas y oficinas civiles, además de suspender los eventos deportivos.

Maurice Haddad, director de la Compañía General de Transporte Interno en Damasco, dijo al periódico al-Watan que el gobierno ha establecido cuotas de diésel más estrictas, lo que lleva a menos servicios diarios de autobuses.

El sitio web de noticias Athar-Press informó que varias panaderías en Damasco tuvieron que cerrar debido a la falta de combustible.

Se necesita combustible para generar electricidad en Siria, y la falta de combustible nacional o importado significa que la mayoría de los hogares en Siria tienen alrededor de una hora de electricidad en varios intervalos cada día, y la cantidad está disminuyendo a diario.

Exención de sanciones solo para Idleb y los kurdos

Las únicas dos áreas en Siria que no están bajo la administración de Damasco son Idleb en el noroeste y la región kurda patrocinada por Estados Unidos en el noreste. Las sanciones de EEUU están exentas de enviar artículos solo a esos dos lugares. Pero esos dos lugares representan un pequeño número de sirios en comparación con los civiles de todo el país y las principales ciudades de Damasco, Alepo, Homs, Hama y Latakia.

Estados Unidos se asegura de que las personas que están en contra del gobierno sirio sigan siendo recompensadas con suministros y reconstrucción, mientras que millones de civiles pacíficos se mantienen en un estado constante de sufrimiento y privación.

 

 

 

 

► Steven Sahiounie, estadounidense de origen sirio, es un periodista y analista político especializado en Siria. Publicó artículos para numerosos medios y ha sido entrevistado por medios estadounidenses, canadienses y alemanes.

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