Líbano y el riesgo de la crisis gubernamental

El proceso de formación del gabinete, ya obstaculizado por un desacuerdo entre Aoun y Hariri sobre la distribución de carteras ministeriales, se ha visto agravado esta semana por la acusación del presidente de que el primer ministro designado “no ha sido sincero con respecto al proceso”, profundizando una crisis de confianza entre los dos líderes y aumentando la tensión política en el Líbano.

Una fuente cercana al Palacio de Baabda afirmó este jueves que “la formación del gabinete está completamente estancada” y que “no existe un avance inminente para salir del punto muerto”. Según la fuente, las posibilidades de lograr un avance en el impasse, “dependen en gran medida de que los partidos de ambos mandatarios suavicen sus posiciones inflexibles”.

La acusación de Aoun de que Hariri no estaba siendo sincero, apareció en un video filtrado que se volvió viral en las redes sociales y fue transmitido por las estaciones de televisión locales desde el martes por la noche, y planteó nuevas preguntas sobre si los dos líderes podrán resolver sus asuntos y conformar un nuevo gabinete.

Por su parte, Hariri, visitó Turquía la semana pasada y proyecta realizar varios viajes al extranjero para restablecer las relaciones de Líbano con países árabes y europeos. 

Desde su designación el 22 de octubre, el PM se ha esforzado por formar un gabinete propuesto de 18 miembros de expertos no partidistas para implementar las reformas necesarias con urgencia para desbloquear miles de millones de dólares en ayuda internacional prometida. Pero los intentos fracasaron por una disputa con Aoun sobre quién nombrará a los ministros cristianos y quién controlará dos ministerios clave (Ministerio del Interior y Ministerio de Justicia).

Asimismo, el proceso se vio afectado por las tensiones que rodean la investigación sobre la explosión masiva del puerto que mató a más de 200 personas y destruyó gran parte de la capital en agosto.

El mes pasado, Fadi Sawan, el juez que dirigía la investigación de la explosión, acusó de negligencia a Diab y a otros tres ex ministros, incluidos dos funcionarios con estrechos vínculos con el presidente del Parlamento, Nabih Berri. Posteriormente, suspendió la investigación a la espera de un fallo de la Corte Suprema de Beirut sobre una solicitud de transferir el caso a otro juez. Este lunes, el tribunal dio luz verde para continuar con la investigación, pero aún no se ha pronunciado sobre la solicitud. 

Mientras tanto, el estancamiento político en el Líbano bloquea las reformas que la comunidad internacional está exigiendo antes de brindarle al país la ayuda financiera prometida para contener su peor crisis económica y financiera en décadas.