Líbano se prepara para una nueva cuarentena total

El Comité Ministerial de COVID-19 de Líbano ordenará en las próximas horas una nueva cuarentena de tres semanas para contener el aumento reciente de la propagación del virus. El equipo, presidido por el primer ministro interino Hassan Diab, realizó una reunión matutina para discutir los detalles del aislamiento y su duración.

"Nos enfrentamos a una fase muy crítica y necesitamos medidas excepcionales y firmes, así como una implementación estricta", dijo Diab. Advirtió que las unidades de cuidados intensivos (UCI) de los hospitales están a su “máxima capacidad”, y agregó que el Líbano enfrenta “una situación muy difícil''. 

En Beirut, médicos y enfermeros dialogaron con medios locales sobre la compleja realidad que afrontan los hospitales y centros de salud. “Trasladamos a casi 100 pacientes por día a lugares que cuentan con todas sus UCI ocupadas”, aseguran.

El Líbano registró un número récord de casos de coronavirus la semana pasada, cerca de los 200.000 contagios totales y casi 1.500 muertes. Las autoridades han pronosticado un aumento en los casos después de la temporada navideña, luego de que muchos libaneses ignoraron las medidas de seguridad.

Al comienzo de la pandemia, el país mediterráneo logró mantener una curva estable en los contagios, con una rápida cuarentena y medidas estrictas. Sin embargo, los números comenzaron a aumentar este verano, luego de la explosión masiva en el puerto de Beirut que sacudió la ciudad y golpeando aún más al sector de la salud, debilitado por la crisis económica que el país arrastra desde hace meses.

Además, a pesar de un bloqueo de dos semanas impuesto en noviembre, los números siguieron aumentando, empeorando con las temporadas de vacaciones y el regreso de casi 80 mil expatriados para celebrar las fiestas en casa. Esta Navidad, los cierres de ciudades y pueblos no lograron contener nuevas infecciones y las multas para los vehículos no detuvieron las grandes reuniones.